viernes, 14 de octubre de 2011

Truco número 1: Qué hacer cuando estás triste.

¿Qué hacer cuando se está triste? Esa pregunta es muy ambigüa, pero quizá se remonta a que nuestros corazones, muchas veces, lo son.
Hay personas que, transmitido ya desde el mito de la Antigüa Grecia, acallaban sus penas con más dolor, para así sentirse más identificados con algo ajeno y tener como objetivo, finalmente, sentirse bien.
Para que lo entendáis, es como si tu llegas a tu casa después de que tu novia te haya dejado por otro; en la parada el autobús ha salpicado un charco y te ha llenado de barro (además de que iba petado y has tenido que esperar al siguiente) luego te ha entrado dolor de barriga, pero, por fin, logras tumbarte sobre la cama.
-No basado en hechos reales-
¿Y qué hacer sobre ese colchón, ahora maremotriz de tu propia energía, que sirve como muralla amortiguadora de próximos males y visitantes no-deseables?
Llorar. Llorar y ponerte a escuchar música más triste todavía. ¿Cómo apaciguar el dolor con una balada triste, o con una canción de desamor? Pues sí, mucha gente lo hace.
Si hoy estoy mal, me hundiré todavía más, y mañana ya saldrá el Sol.
Esa es una de las técnicas, aunque muchos puedan pensar que sea algo sádica. Yo, personalmente, prefiero pasarme al bando contrario. ¿Que me ha ido mal? No importa, cojo mi mp4, pongo algo alegre, y cuando termine de sonar la última triada del tema "no-lo-sé-es-un-ejemplo", ya habrá pasado la tempestad.



Hace un mes, aproximadamente, recibí una de las peores noticias que he recibido en toda mi vida. Aún sigue permanente, pero no aflojo el ritmo. No permitiré que me afecte más de lo necesario, asi que seré más fuerte si muestro a esa mala noticia el espejo de mi sonrisa para una nueva venidera.
Aunque de aquí a que llegue la buena, como digo, lo mejor es esperar. Y qué mejor que en un banco del parque, con las hojas del otoño que se avecinan...



Los corazones son ambigüos al dolor, eso es cierto. Pero deberíamos reflexionar... ¿acaso nos hacemos bien centrándonos en un tema que nos desborda para auto-retractarnos de la felicidad?
Es decir, ¿Es combatible el dolor al dolor?
Habría que preguntárselo a los Griegos.


~Contemplando la no-lluvia-pero-no-te-preocupes-que-ya-vendrá-de-Octubre~
a día 15.
Gracias por leer. :)

3 comentarios:

  1. jiji grasias. Me paso ahora por tu blog *-*

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  2. Hola! :) Muchísimas gracias por pásarte por mi blog, seguirme y comentar! ^^
    Me gusta mucho tu blog así que yo también te sigo! (:
    Y, tienes razón cuando estás triste lo mejor es escuchar música alegre y pensar en otras cosas y esperar, a que como se suele decir, salga el sol de después de la tormenta :)
    Besos! <3

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